XIII Edición

Curso 2016 - 2017

Alejandro Quintana

¿Por qué?

Alberto García Ferrera 

                          Colegio Mulhacén (Granada)  

Otra tarde más se me presenta con varios exámenes en el horizonte, deberes atrasados, proyectos que tengo que desarrollar... De pronto me entra la sensación de que no puedo con tanto trabajo. Y la pregunta que inevitablemente me viene a la cabeza es: «¿Por qué tengo que estudiar?».

La diversidad de respuestas que encuentro es alarmante. Por un lado, tenemos a todos aquellos que nos piden que pongamos los pies en el suelo y la mirada en el futuro. No en vano, nos exigen determinadas notas de corte para cada una de las carreras que ofrece la Universidad, esas décimas que tendremos que arañar si queremos entrar en determinada facultad y tener la oportunidad de optar a las salidas profesionales que nos aguardan.

En el otro lado de la balanza pongo la tentación de pensar que todavía queda mucho para esos momentos, así como las distracciones que tengo más a mano y la fuerza de la pereza. En ocasiones pienso que debo aspirar a algo más que a aprobar raspando todas las asignaturas en cada evaluación, que mis padres se merecen algo más, que no es justo que mis anhelos busquen aprobar únicamente para poder salir el fin de semana...

Sé que mi buen hacer o mi indiferencia repercutirá directa y únicamente en mí y, en el futuro, en la familia que deseo formar. No quisiera que las pocas ganas que hoy pueda tener de zambullirme en los libros, tuvieran consecuencias serias para mi mañana.

Mientras tanto, esta tarde me pondré a estudiar.