X Edición

Al mal tiempo buena cara

Francisco Javier Merino, 15 años

                 Colegio Mulhacén (Granada)  

“Tienes que esforzarte mucho porque España está muy mal y, a día de hoy, es muy difícil conseguir empleo. Solo conseguirás trabajar si en tus estudios eres el mejor”, suele decirme mi padre, pero no creo que sea la única persona que en estos tiempos dé estos consejos.

Todo el mundo habla de lo mal que está la situación, de sus problemas económicos, etc. Parece obvio que no estamos pasando la mejor época, pero tampoco hay que dejarse llevar por el pesimismo, como si fuésemos un país del tercer mundo.

España suele compararse con potencias mundiales como Alemania y, claro, no nos queda sino consideramos una nación hundida en problemas. Por eso, para darnos cuenta de nuestra verdadera situación deberíamos compararnos con otro tipo de países, no tan potentes, como los del continente africano.

Si pensáramos que la situación económica y social española es crítica, en África cualquier habitante nos miraría extrañado. Muchos africanos arriesgan la vida en pateras para llegar a nuestras costas, en las que afirmamos que no hay posibilidades.

La gente que afirma que aquí lo pasa mal, podría darse con un canto en los dientes por no haber nacido en el otro extremo del mundo. Aquí no siempre hay ofertas de trabajo, cierto, pero allí se explota a muchos trabajadores por unos salarios muy menores a las ayudas que reciben nuestros desempleados. Si aquí la mayoría de proyectos están detenidos, allí ni siquiera existen. Estas son algunas comparaciones, pero para conocer de verdad los problemas que se dan fuera de nuestras fronteras hay que haberlas experimentado.

Con todo, no quiero decir que no estemos en crisis, ni que los parados no se encuentren en una pésima situación. Pero debemos buscar aspectos positivos y no ver siempre el vaso medio vacío.