XVII Edición
Curso 2020 - 2021
¿Ciencias o Letras?
Paula Contreras, 18 años
Colegio Senara (Madrid)
¿Eres de Ciencias o de Letras? nos preguntan a los estudiantes repetidas veces, a medida que nos vamos acercando a Bachillerato y debemos acotar nuestras preferencias respecto a las asignaturas, en función de lo que deseemos estudiar en la Universidad.
Sin embargo, esta pregunta es una generalización, pues, ¿acaso sólo debemos saber de ciertas cosas? ¿Acaso la sabiduría está encasillada en compartimentos? ¿Es que no se puede aspirar, a la vez, a una formación superior en Ciencias y Letras?
La Historia, en su amplio recorrido, nos brinda innumerables ejemplos de que las ramas del conocimiento están hechas para coexistir. No en vano, en la Antigua Grecia, a las personas que poseían conocimientos en numerosas disciplinas, se las denominaban polímatas. Los grandes filósofos, por ejemplo, también fueron matemáticos, físicos, médicos, literatos... Pitágoras, sin ir más lejos, fue un notable matemático, conocido por aportar soluciones fundamentales como su célebre "Teorema", lo que no le impidió ejercer la filosofía. Y si damos un salto sobre los siglos, Leonardo da Vinci fue artista (cultivó con maestría el arte del dibujo y la pintura), al mismo tiempo que ejercía la arquitectura, la ingeniería y la botánica. Y a Descartes –cuyas coordenadas son de gran utilidad para las ciencias experimentales– se le considera el padre de la filosofía moderna; sus teorías le convirtieron en adalid del racionalismo. Otro caso es Gregorio Marañón, reconocido médico español, quien fue historiador, pensador, articulista, escritor y conferenciante del novecentismo. Por último, en nuestra época, Hedy Lamarr, estrella cinematográfica de Hollywood, inventó el wifi, y Merritt Moore nos demuestra que no hay incompatibilidad en ser bailarina profesional y doctora en física cuántica.
No tengamos miedo a aspirar a ser polímatas, ya que el conocimiento es, a la fuerza, interdisciplinar. Ciencias y Letras son complementarias, no opuestas, fundamentales para entender el mundo. Como dijo el economista Kofi Annan, Premio Nobel de la Paz, el conocimiento es poder y la información es libertad. Por tanto, el ser humano debe interesarse por todo el saber al mismo tiempo que se informa de todo lo posible. Solo así es posible el progreso de la sociedad.