X Edición

Crisis de identidad

Judit Lladós, 15 años

                  Colegio La Vall (Barcelona)  

Atrás quedaron esos tiempos en los que creías ser el rey del mundo. Poco a poco sales de la burbuja, miras a tú alrededor y ves que tu existencia, tal y como la percibías, es tan solo un espejismo.

Atrás quedaron todas esas veces en las que, vanidoso, creías merecer la razón aun sabiendo que no la tenías. Poco a poco te das cuenta de que las cosas nunca son blancas o negras, que siempre hay un porqué detrás de todo.

Atrás quedaron esos tiempos donde el otoño era un simple tapiz de hojas pardas, la primavera una etapa donde las flores conquistan caprichosos colores. Ahora eres capaz de apreciar las pequeñas y grandes creaciones que Dios pone a tu alcance y dar gracias por ellas.

Atrás quedaron esos tiempos en los que pensabas que la libertad era tan solo un estado físico. Tras varios intentos frustrados has llegado a la conclusión de que la libertad, nuestra libertad, implica bastante más.

Atrás quedaron esos tiempos en donde tu motor de vida era el carpe diem. A medida que los días se suceden, sientes la necesidad de establecer metas más ambiciosas. Ya no te limitas a pasar por la vida sin hacer ruido.

Atrás queda esa crisis de identidad en la que de repente, y sin saber cómo, te habías visto inmerso. Vas descubriendo quién eres y qué quieres.

Atrás queda esa etapa, la adolescencia, en la que aún crees que las ranas se transforman en príncipes y que todas las princesas visten de rosa. Descubrirás que la madurez no es exclusiva de las frutas, que para seguir avanzando no debes detenerte.