X Edición

El espíritu de la Navidad

Teresa Narro, 13 años

                 Colegio Altozano (Alicante)  

Está cambiando la forma de celebrar la Navidad en las familias. Parece que muchos tienen asumido que celebrarla significa ir de compras y gastar.

La publicidad aprovecha estas fechas para bombardearnos con mensajes llamativos y coloristas que transmiten la idea de felicidad y satisfacción si compramos todo lo que nos ofrecen.

Muchos padres a causa de los anuncios, del entorno social y la presión de sus hijos acaban por convencerse de que para demostrar amor es necesario regalar sin descanso, a pesar de que, precisamente en estas semanas del año los precios suben.

A veces es mejor comprar presentes más sencillos para que los niños puedan usar su imaginación. De este modo, no olvidaremos que lo que verdaderamente estamos celebrando es el nacimiento de Jesús y, por ende, la unión familiar. Por eso, deberíamos acordarnos de los que peor lo están pasando, ya que hay mucha gente que tiene dificultades económicas que les impiden comer bien o calentarse.

Ayudar a los que sufren, dar un poco de tiempo a aquellos que necesitan compañía, produce mayor satisfacción que las cosas materiales.

Recuperemos el espíritu de la Navidad. Celebrémosla humildemente.