XV Edición

Curso 2018 - 2019    

Alejandro Quintana

El regalo

María de los Ángeles Leal, 15 años

Colegio La Vall (Barcelona) 

TMaría estaba muy indecisa. No podía dormirse. En el reloj del salón habían dado las dos y un sentimiento de incertidumbre le revolvía el estómago.

«¿Me atrevo a hacerlo o no?... ¿Qué dirán mis amigas?... ¿Y cómo me verán los chicos guapos del tren?».

Pensó en la imagen de su madre, con su tierna sonrisa, la cara pálida y las mejillas chupadas debido al avance de su enfermedad. Además, se repitió para sus adentros las palabras que solía decirle: «Dar de lo que nos sobra es muy fácil, pero dar lo que apreciamos es más difícil». Le ayudaron a considerar que también había niñas de su edad que lo necesitaban. Eso le daba fuerzas, pero seguía sin decidirse.

Por fin cayó en un sueño profundo.

Despertó al día siguiente. ¡Era su gran oportunidad!

Llegó al colegio, que estaba adornado con múltiples motivos de color rosa, en referencia a esa jornada tan especial. Algunas de las compañeras de María estaban igual de nerviosas e indecisas que ella.

Tomó aire, se sentó en una silla y se enfrentó a las tijeras. Con la melena que le cortaron hizo una trenza y la entregó para que con ella confeccionaran una peluca para las niñas, adolescentes o mujeres que sufrían cáncer de mama, como su madre, que en el inicio de su tratamiento tuvo la fortuna de recibir un postizo de cabello natural.