VI Edición

Curso 2009 - 2010

Alejandro Quintana

Indiferencia

Carlota Ciudad, 16 años

                 Colegio Canigó (Barcelona)  

Una fría gota de agua me cae en un ojo y me hace parpadear. Observo cómo en el suelo van apareciendo círculos que oscurecen las baldosas a medida que llueve más y más. Es invierno, y decir que hace frío es poco.

La gente va corriendo para ponerse a cubierto. Unas chicas con uniforme se ríen a carcajadas y, mientras tanto, se tapan la cabeza con sus carpetas. Llegan hasta una cafetería y se meten dentro. Miro hacia el cielo; aquel espacio que parece no tener fin y que podría recorrer sin descanso, está ahora cubierto por un manto gris oscuro y amenazador.

Escucho mi estómago resentirse. No he comido nada en veinticuatro horas. Antes, en las plazas nos daban comida a mí y a mis compañeros, pero después las autoridades lo prohibieron y empezamos a pasarlo mal. Además, al ser invierno, nuestra fuente natural de alimento parece dormida.

Miro a mi alrededor y veo la gente pasar. Ellos no se fijan en mí. ¿Por qué deberían hacerlo? Para ellos sólo soy un simple pájaro.