XIV Edición

Curso 2017 - 2018

Alejandro Quintana

Mi paso por unas
Jornadas Literarias 

Jorge Gutiérrez Leguina, 15 años

            Colegio Munabe (Vizcaya)  

Pocas cosas existen tan apasionantes e intrigantes como la Literatura. Todos los adolescentes tenemos hobbies, todos tenemos nuestra personal e intransferible pasión porque cada uno es diferente y, por tanto, es difícil coincidir en los gustos y habilidades, pero en cuantos más mundos te adentres y más gente conozcas, más argumentos tendrás para valorar y comparar… Y la escritura es algo que independientemente de que la adores o no, te aporta inmensidad de visiones y logra que al mirar a tu alrededor consigas ver cosas que antes ni imaginabas.

Para adentrarse en la Literatura, uno necesita un empujón que le incite a pensar y a querer saber más acerca de todo lo que contienen los libros, algo que he tenido la suerte de recibir. Por tanto, debo agradecérselo a mi profesor, Eduardo Herrero, que ha luchado para que Excelencia Literaria llegara a Munabe y porque me ha dado la oportunidad de asistir a las Jornadas Literarias. Por otra parte, también debo felicitar a Miguel Aranguren por haber creado este proyecto y habernos dado a los adolescentes la oportunidad de hacer públicos nuestros escritos para que así podamos llegar a tantos lectores.

Respecto a lo que vivimos el pasado trece de abril, debo comenzar explicando que nueve alumnos de mi colegio tuvimos la oportunidad de acercarnos a la cosmopolita Universidad de Navarra, donde se celebraban las Jornadas de Excelencia Literaria. Al finalizar el día, el sentir de todos era que la experiencia había sido excelente. De hecho, nos quedamos con ganas de más y deseamos volver el próximo curso, pues fue una oportunidad única, comenzando por la perfecta organización de las actividades, pues fuimos capaces de compaginar el adquirir conocimientos literarios con pasar un buen rato gracias a algún taller en el que realizamos actividades experimentales que nunca nos habríamos planteado y que nos ayudaron a dejar a un lado la timidez.

Cada vez que pienso en lo vivido en las Jornadas de Excelencia Literaria no sólo tengo la sensación de haber adquirido nuevos conocimientos, sino que también percibo el aire fresco de los buenos momentos que hemos vivido entre jóvenes escritores de toda España.