III Edición
Curso 2006 - 2007
Una estrella que nunca
ha brillado
Jorge Simón, 14 años
Colegio Vizcaya (Vizcaya)
David Beckham aterrizó en el aeropuerto de Barajas en julio del 2003, acompañado por su polémica y mediática esposa, Victoria Beckham. Venía a firmar el contrato que le convertiría en el cuarto galáctico que iba a fichar Florentino Pérez para reforzar la plantilla del Real Madrid.
David y su mujer acapararon la atención de los medios, que lo veían como un jugador muy brillante y como una máquina de publicidad, que hacía que todo lo que tocase se convirtiese en dinero. Después de firmar el contrato, deleitó a los aficionados con una exhibición de su control del balón. Al día siguiente, se reunió con los que serían sus compañeros de equipo.
Pasado el tiempo me pregunto qué ha hecho este jugador por el club, que renunció al fichaje de Ronaldinho para contratarle. Desde que David Beckham llegó al Santiago Bernabéu, cesaron los títulos, las noches de gloria en el fútbol europeo y la chispa en el juego que caracterizaba al club merengue.
Beckham ha dado menos de lo que se preveía, ya que se centraba más en su faceta de vendedor de productos que como jugador, y eso llevó al equipo a una crisis que dura hasta el día de hoy.
Para hacerle ver que la directiva había puesto toda la ilusión en su fichaje, se le dio la titularidad absoluta, además de relegar a otro jugador de su misma posición, Luis Figo, a la banda izquierda (sitio donde nunca ha jugado con la misma seguridad que en la derecha). Por si fuera poco, despidieron al entrenador que había participado en la recuperación del equipo para contratar a otro cuyo único aval era que tenía confianza con el inglés.
David siempre ha sido muy irregular y la ilusión que despertó en los aficionados se la arrebataba mediante un juego patético en ocasiones. Los seguidores que pagaban la entrada e iban a verle, terminaban aburridos debido a un juego poco vistoso, lento y torpe.
¿Y ahora qué? La estrella que llegó hace tres años y nunca a brillado como esperaba, se marcha dejando una huella casi inapreciable en la historia del club. La directiva y el entrenador perdieron la confianza que tenían en David. ¿Quién tiene la culpa de todo ocurrido en torno a él?
La marcha de Beckham es un acto poco honesto hacia el club que por él rechazó a uno de los actuales mejores jugadores del mundo, y me decepciona como seguidor del Real Madrid.