XIII Edición

Curso 2016 - 2017

Alejandro Quintana

Café Jazz

Carlos Fernández Rubio, 16 años

                  Colegio Tabladilla (Sevilla)  

Un ritmo de cuatro por cuatro atravesaba su cabeza mientras caminaba por la calle rumbo al local: acorde Do mayor, La menor, Mi mayor y Do Mayor de nuevo. En su imaginación construía notas que impactaban contra los edificios que se iban cruzando ante sus ojos. El lejano eco de la realidad le martilleaba la cabeza como una baqueta a su tambor. De pronto una melodía se hizo hueco y empezó a tomar forma hasta que uno de los standards apareció en su mente: "Song for my father" se materializó en su imaginación.

Volaba el sonido de las trompetas, acompañado por un tenue contrabajo que marcaba el ritmo de la mano de la batería, que manejaba Charly (una de las baquetas) esforzándose por mantener fijo el cuatro por cuatro.

En el compás cincuenta y seis de la canción chocó contra un acorde de Sí menor que, al observarlo, se transformó en un semáforo en ámbar acompañado por un puñado de transeúntes que le observaban perplejos.

—Está loco —creyó escuchar mientras continuaba andando por la acera.

Retomó en el siguiente tiempo del standard, y apareció el piano, rasgando la atmósfera creada por la imaginaria banda. El roce de las teclas del recién restaurado piano le dio, a su gusto, un toque antiguo a una canción que ya estaba a punto de concluir.

Durante el solo de trompeta que introducía los últimos cuatro compases abrió la puerta del local. Lo último que pensó antes del ensayo, justo después del último golpe de batería en su cabeza, fue:

—Necesito un café.