XI Edición

Curso 2014 - 2015

Alejandro Quintana

El baúl de los recuerdos

Beatriz Alted, 14 años

                 Colegio La Vall (Barcelona)  

Fue en verano, uno de esos días de cielo azul y sin una nube. Como las piscinas estaban llenas de gente, Pedro y Sara se quedaron en casa de sus abuelos. Eran dos hermanos curiosos a los que gustaba buscar pasadizos para investigar. Aquella casa vieja, sin duda, les ofrecía muchos atractivos.

Pasaron un buen rato abriendo y cerrando puertas, hasta que al subir una escalera descubrieron la entrada a una habitación grande y oscura. Estaba repleta de trastos, muebles viejos, cajas a rebosar, baúles y juguetes antiguos, algunos rotos. Por los rincones se acumulaba el polvo.

Pedro y Sara fueron abriendo baúles y cajas, curioseando detalladamente por cada recoveco, por si veían algo interesante.

Al final dieron con un pequeño arcón de metal, en cuya tapa se leía una inscripción: “Baúl de los recuerdos”. Intentaron abrirlo, pero estaba cerrado con llave.

La investigación se volvía interesante.

Estuvieron largos minutos buscando un instrumento que hiciera las funciones de la llave. Sara encontró un alambre.

Con emoción, Pedro movió la improvisada ganzúa. Consiguió abrir el cofre.

Estaba vacío.

Cuando acabó el día, contaron lo sucedido a su abuela. Ella rio y, sabiamente, les explicó que ese pequeño cofre vacío no era nada comparado con el verdadero baúl de los recuerdos, la habitación donde habían estado. El viejo desván.