XI Edición

Curso 2014 - 2015

Alejandro Quintana

El vecindario

Teresa Alonso, 16 años

                Colegio Senara (Madrid)  

Navegaba por aquel mar de baldosas rectangulares. Parecía ir sin rumbo, pero sus pies sabían que se conducían hacia la casa de aquella persona tan amada.

Se apoyó en una verja, que se venció bajo su peso, saludándola con leves chirridos.

No entendía por qué tenía tan pocas visitas. Tanto ella como sus vecinos disfrutaban de una parcela amplia y tranquila, alejada de la ruidosa capital. Perfecta para visitar a aquellos seres queridos que, llegada la hora de su vejez, decidían mudarse juntos.

Saludó al portero, como de costumbre, y bajó hasta la explanada que la llevaba hasta el lugar que ella ocupaba. Contempló el paisaje en derredor, a la vez que se cambiaba las flores de mano. Las que llevó el día anterior estaban intactas, algunos capullos aún sin abrir. Pero las apartó para poner las nuevas.

Se arrodilló a los pies de su cama y recorrió con los dedos el contorno, a la vez que leía con ojos llorosos la inscripción que mandó grabar hacía años:

Alicia Montés Navarro

"Gracias por enseñarme que la vida es más que una sucesión de días"

1935-2010