XIII Edición

Curso 2016 - 2017

Alejandro Quintana

Inspiración 

Laura Leonelli, 16 años  

                Colegio Canigó (Barcelona)  

Me gustaría presentarme: me llamo Laura Leonelli, estudiante de Bachillerato, pero me gusta referirme a mí misma como «artista». Tengo dieciséis años y estoy escribiendo una novela a la que dedico mucho esfuerzo y tiempo, pero hay un inconveniente: parece que se ha convertido en un proyecto interminable. Llevo poco más de un año trabajándola pero, literalmente, los estudios me ahogan, al ocuparme más de lo que deberían.

Los ratos que dedico a escribir se me hacen cortos. Además, como bien sabe todo el mundo, la inspiración no viene necesariamente cuando la llamas, sino cuando le apetece. Hace poco estaba en clase y, de pronto, me entraron unas ganas terribles de escribir. Sabía cómo debía seguir el capítulo en el que estaba enzarzada y necesitaba reflejarlo antes de que se me fuera el santo al cielo. Entonces me volví hacia una amiga y le pregunté:

—¿Nunca te ha pasado que, de repente, te asaltan muchas ideas y necesitas escribirlas?

Me observó con una expresión de rareza y me dijo que no. Pero enseguida me entregó un par de hojas en blanco.

Cuando tomé el bolígrafo, noté que este me miraba con expresión triunfadora, como si me quisiese decir: «Tú y yo vamos a escribir un bestseller ahora mismo». Y le hice caso: me puse a narrar, a narrar, a narrar… Toda mi creatividad salía a la luz en aquel momento tan inesperado, en mitad de clase de Lengua castellana.

A fin de cuentas, no importa la hora que sea, el lugar en el que te encuentres ni la gente que te rodee. Si uno nota que le ronda la inspiración, debe dejarla libre. ¿Quién sabe?... Quizá sea el comienzo de una obra literaria.