XVIII Edición
Curso 2021 - 2022
Madre
Rocío Yuste, 17 años
Colegio Iale (Valencia)
Madre es una palabra sencilla y a la vez profunda. Este bisílabo que repetimos diariamente, una vez tras otra, tiene un significado objetivo. Pero también subjetivo, de modo que es imposible definirlo con un único concepto.
La palabra madre llega a cada uno de los sentidos que posee el ser humano: desde el sabor de un plato recién hecho al sentimiento de acogida en un abrazo caluroso; del olor a ropa recién lavada al sonido de una nana. Aunque esta palabra también refleja una preocupación ininterrumpida, que significa ir un paso por delante, claro ejemplo de que es mejor prevenir que curar.
Todas las madres tienen un sexto sentido que desarrollan en cuanto reciben a su primer hijo en el regazo. Es un momento indescriptible, que genera unos vínculos que la Ciencia no ha logrado explicar del todo, pero a su vez es tan natural que no nos extraña. Madre es la que se encarga de enseñar al recién nacido lo más bonito de la vida, el amor, pero la que también permite que el fruto de sus entrañas tropiece por el camino, aunque esté siempre dispuesta a tenderle la mano.
Mi madre es la mejor madre, la única que podía haber tenido. Siempre que tengo un mal día descubre cómo me siento, sin necesidad de que hablemos. Es como si pudiese ver mi interior y descifrar mis emociones. Por eso el vínculo madre e hijo es una fuerza indestructible de la Naturaleza. Es verdad que en ella descubro defectos, pero gracias a ellos aprendo que debemos pelear contra nuestras debilidades para superarlas.
Una madre es maestra, guía, hogar, calor, la mejor amiga y la más fiel compañera. Lo es todo. Por eso agradezco a la mía todo su apoyo a mis sueños y su ayuda para que pueda cumplirlos. ¡Gracias por confiar en mí!