XIX Edición

La importancia
de la pasión 

Sheila Navarro Pérez (16 años)

Colegio Iale

Gimnasia, baloncesto, baile, tenis, pádel, guitarra, canto… Tras buscar la pasión en muchas actividades a lo largo de mi vida, debo reconocer que todas terminaron en fracaso. Pero no me rendí y seguí indagando, hasta que un día encontré la actuación, que me da la oportunidad de transformarme en distintas vidas que en nada se parecen a la mía, pero que cada una de ellas me enseña experiencias asombrosas. Actuar me permite también conectar con el público y percibir que este siente emociones a través de mi interpretación. Es una experiencia maravillosa. A pesar de haber tardado dieciséis años en descubrir el teatro, por fin formo parte de él.

Recuerdo cuando, de pequeña, mis amigos me preguntaban por mi sueño, ya que ellos lo tenían muy claro (unos policías, otras cantantes, jugadores de fútbol, médicos…). Avergonzaba, volvía la cabeza mientras les respondía un triste <<Aún no lo sé>>.  Sin embargo, cada vez que en la televisión aparecían actrices magníficas, se me encendía el deseo de llegar a ser como ellas. El caso es que la interpretación siempre ha estado presente en mi cabeza, pero, al verla inalcanzable, mis ímpetus se frenaban. 

Hace un año di el paso y comencé el camino que me conduce a mi sueño. Sin ninguna duda, es la mejor decisión que he tomado en mi vida. Actuar me enseña que merece la pena indagar en nuestros talentos, pues uno acaba por encontrar aquello que le despierta un sentimiento de felicidad plena.