XII Edición
Curso 2015 - 2016
Un poco antes
Francisco Rubio, 17 años
Colegio El Romeral (Málaga)
Salimos de casa con prisa; ¡tenemos poco tiempo! Se trata de una ciudad nueva y avanzamos por una calle recta e iluminada, en la que todo resulta previsible. Pero, de repente, alcanzamos una bifurcación y debemos adentrarnos por callejones oscuros en busca de nuestro destino.
Aquellos que más nos quieren nos han aconsejado que vayamos por caminos amplios, dotados de farolas, pero el GPS señala que debemos girar hacia otro lado. Nos entran las dudas, ya que podemos perder lo que teníamos conseguido y acabar en un destino diferente e imprevisto. Podríamos, incluso, no llegar a tiempo.
Detenemos el automóvil junto a la acera y buscamos a alguien que nos indique alguna pista por donde podamos proseguir. Unos viandantes dicen una cosa y otros la contraria. Nada se nos presenta claro. No debemos demorarnos.
Buscamos en nuestro corazón el valor necesario para tomar una decisión y al fin nos adentramos por una travesía en penumbra. Ojalá no nos hayamos equivocado porque, lo sabemos, no hay marcha atrás.
Ponemos música y nos relajamos hasta que desembocamos en un atasco. Un policía nos informa de que, un poco más adelante, han cortado una avenida a cuenta de un accidente de tráfico. Miramos la hora… ¡Solo quedan cinco minutos!
—Es necesario que demos la vuelta —dice mi compañero de la derecha.
—No tenemos tiempo. Si llegamos tarde, no nos dejarán entrar —escucho al que viaja detrás de mi asiento.
Pero soy yo quien lleva el volante. Giro el coche y me vuelvo en busca de un atajo.
Poco después llegamos, al fin. Pero la función ha comenzado y el teatro ha cerrado sus puertas. Una pena, pues hemos gastado mucho dinero en nuestras entradas. Sin embargo, sabemos que hay más funciones, por lo que no todo está perdido. El dinero va y viene, así que podremos ver el musical otro día.
En las taquillas compramos cuatro boletos nuevos. Y nos prometemos, para entonces, salir un poco antes.