Si María tuviera que recomendar tres novelas, escoge “La vida sale al encuentro”, de José Luis Martín Vigil (<<me gusta cómo crece interiormente el protagonista. Es un libro sincero acerca de aprender a vivir>>), “Crimen y castigo”, de Dostoievski, por la descripción psicológica de sus protagonistas, y “Viento del este, viento del oeste”, de Pearl S. Buck, que muestra el choque entre generaciones y culturas desde la experiencia de una mujer. Pero si le preguntamos por su escritor favorito, pronuncia el nombre de Miguel Hernández, <<pues se hizo poeta gracias a una infancia en un ambiente muy sencillo>>.

<<Leer es como ir al cine, pero la película te la montas tú. Descubres el encanto de dar tu visión a las historias escritas por otros>>. Por eso María Saldaña, antigua alumna del colegio La Vall, lee a diario <<después de comer y antes de dormir, Las tardes en las que no tengo clases en la Universidad y, sobretodo, los domingos>>. Ha formado su propia biblioteca con los ejemplares de la librería de segunda mano Re Read. <<Los títulos me los aconseja mi abuelo, o los busco porque el autor me ha llamado la atención en clase de Literatura o me los recomienda mi profesora de Filosofía>>.

<<Banksy comparte sus obras de arte en las redes sociales y cuenta verdades a través de ellas. En Twitter hay un Góngora y un Quevedo que se pelean entre ellos; es gracioso. Pinterest es el lugar de las ideas que nos recuerda que tenemos que hacer muchos viajes… Una vez leí que Instagram es un álbum de fotos infinito. Se pueden dar muchos usos de las redes sociales, pero si vas a ponerle tu nombre a lo que cuelgas, haz que sea tuyo>>. 

Para escribir, María Saldaña pone su mesa delante de la ventana y cierra la puerta, para que no entre nadie en su habitación. Suele escribir con un lápiz <<y cuanto más lleno el folio de tachones, mejor>>. Cree que la Literatura es un inmenso relato sobre el ser humano, la vida y el mundo. Cada escritor aporta unas líneas más a ese escrito, para que otros puedan leerlas y, así, conocerse>>.

<<Las clases de Literatura en La Vall eran un tiempo para soñar. Durante todo un curso nos desterraron a un aula que llamamos “La catacumba”, lo que aportaba a la clase un toque todavía más literario>>. Excelencia Literaria, por su parte, <<me ha dado la oportunidad de que un escritor me lea y corrija, y me ha ayudado a descubrir qué quiero transmitir. Gracias a las Jornadas en la Universidad de Navarra y a las reuniones con nuestra profesora de Literatura, Patricia Pujol, he conocido a personas profundas y con una sensibilidad especial>>.

Leer a María Saldaña:

El último día de marzo
Noche nueva
Sin palabras

La cordobesa Isabel Muñoz recomienda la lectura de “Harry Potter y la Piedra Filosofal”, porque <<es la entrada a una de las mejores sagas que he leído hasta el momento. Tengo muchos motivos por los que escogerlo, pero el mayor de todos es que te sorprende, incluso cuando vuelves a leerlo. La trama principal viene aderezada con aventura, amor y tristeza, lo que impide que puedas aburrirte>>. Algo parecido le sucede con “Los juegos del hambre”, <<que te mantienen en tensión. De una página a otra la historia puede trazar nuevos senderos . Me resultó imposible interrumpir la lectura hasta que llegué al desenlace>>. Pero también se enfrenta a títulos clásicos, como “La Metamorfosis”, de Franz Kafka, en la que el lector participa <<para darle su propio significado al texto, para decidir qué es locura y qué realidad>>.

Según Isabel, <<mientras se lee una buena novela, es inevitable no dar rienda suelta a la creatividad. El ocio audiovisual elimina la posibilidad de crear la libre dimensión de cada historia>>. Por eso la lectura es su descanso, el método para relajarse después del estudio. <<Mi padre me ha aconsejado muchos títulos, aunque algunos no me han enganchado>>. También sus amigos le han recomendado alguna que otra novela.

<<Pararse a pensar es necesario para apartar tanto parloteo y tanta imagen digital. Debemos salir al campo para conocer y disfrutar de la vida real>>, aconseja. Quizá por eso Isabel se inspira al escribir en <<las situaciones que veo, las noticias, sentimientos que necesito plasmar… Escribo, retoco y no vuelvo a leer el texto hasta unos días después, para descubrir fallos que me habían pasado desapercibidos, hasta que me decido a entregarlo para su publicación>>. 

<<He pensado mucho qué podría aportar mi Literatura al mundo>>, quizá por eso le gusta tratar problemas actuales y habituales a los que nadie da importancia, <<desde un punto de vista más familiar y cercano>>. Agradece el empujón que recibió en Zalima (Córdoba) para que se inscribiera en Excelencia Literaria, que le ha proporcionado <<consejos valiosos y el ánimo para seguir adelante>>. Isabel sueña ejercer de bioquímica en un laboratorio al tiempo que va publicando sus obras, con el fin de <<divertir y entretener a mis lectores>>. Cree que está en el camino de cumplirlo.

Leer a Isabel Muñoz:

Canciones para claudia
Sofia y yo
Sol y fuego

Gracias a “La vuelta al mundo en ochenta días”, de Julio Verne, Jaime aprendió que lo clásico no tiene por qué ser aburrido. Y con “El camino”, de Miguel Delibes, descubrió un uso del idioma tan bello como preciso. Por su parte, con “El guitarrista”, de Luis Landero, se sorprendió que la novela se compusiera de tantas vidas entrelazadas, como nuestra propia existencia.

<<La novela o el cuento lo crea el lector a medida que va leyendo. La lectura es un trabajo en equipo entre el autor y lector. Sé que leer requiere algo más de esfuerzo que entrar en Youtube, pero está recompensado>>, dice Jaime. <<Por norma general, los lectores nunca leemos tanto como nos gustaría>> remacha. Suele atender las recomendaciones del youtuber Ricardo Carrión, <<que nos aconseja en qué orden enfrentarnos a distintos autores, para comprender mejor su obra>>. Además, hace uso frecuente de miencuentroconlaliteratura. 

A la hora de escribir sus relatos, <<a modo de preparación, escucho algunas canciones de los Beatles, con la misma intención que puede tener un deportista al hacer ejercicios de calentamiento. Luego escribo una frase que considere sonora o capaz de brindarme suficiente material narrativo, y a partir de ahí voy tirando de la cuerda; mis relatos tienen mucho de improvisación. De hecho, tengo muchos cuentos a medias, sin final>>. A la hora de repasar sus escritos, Jaime Llop tiende <<a pensar que lo que he escrito es genial, que merece la pena, pero después me doy cuenta de que no es así. Leer un texto unos días después suele ser como tomarse una sopa fría: aunque es la misma sopa, no sabe igual de bien>>.

<<Gracias a Excelencia Literaria empecé a tomarme en serio la lectura, y ahora forma parte de mi vida. Por cierto, que no sería la misma sin haber participado en este proyecto>>, afirma. <<Me gustaría publicar un libro de cuentos y un poemario, pero aún me queda mucho por trabajar para conseguirlo>>. 

Leer a Jaime Llop:

Entre la casa y la parada
Inclasificable
La batuta perfeccionista

Carmen estudia en el colegio Entreolivos (Sevilla). Disfrutó con la novela “La ladrona de libros”, por la profundidad y el detalle descriptivo que utiliza el autor. “La lección de August” le hizo sentirse identificada <<con valores como la amistad o el apoyo que encontramos en la familia>>. Otro aspecto que le enamoró de la novela <<fue que en cada capítulo el narrador es un personaje distinto, de tal manera que el lector observa que el mismo hecho varía dependiendo del punto de vista de cada uno de ellos>>. “Los miserables”, de Víctor Hugo, <<me transportó a los ambientes de miseria del París de la Revolución. A partir de un puñado de pequeñas historias inconexas, la historia va tomando forma hasta que cada protagonista depende de los demás>>. El novelista Miguel Ángel Jordán <<me ayudó a aficionarme a la lectura. "Uhlma" fue la primera novela para adolescentes que me encantó, y acabé leyéndome todos sus libros>>.

Dice Carmen que las películas y series <<nos "dan hechos" los personajes, el escenario y el ambiente que les rodea. Al leer, en cambio, el protagonista se convierte en alguien más cercano, pues el lector se introduce en su mente y en parte se convierte también en autor del libro. Dependiendo de la forma de pensar de cada lector, la historia y los personajes pueden variar mucho. Por tanto, leer nos ayuda a ser creativos>>.

A pesar de no disponer de mucho tiempo libre, aprovecha los viajes en coche de su casa al colegio y viceversa para leer. Selecciona las novelas en la biblioteca de su casa, en las de sus amigos y en la del colegio. Al escribir <<no sigo unos patrones concretos, pero utilizo la escritura diaria para contar aquellas cosas que me han sucedido. Eso sí, nunca he entregado un relato a Excelencia Literaria sin revisarlo antes. Los relatos los escribo poco a poco, en varios días, para no dejarme llevar por la emoción del momento: lo que en un arrebato te parece una obra de arte, al día siguiente puede darte vergüenza>>. Carmen Almandoz tiene claro que es escritora gracias al taller literario de Entreolivos y al empuje de su madre. Además, <<Excelencia Literaria me ha hecho madurar en lo literario y en lo no literario. Al principio me resultaba difícil aceptar las críticas sobre mis textos, pero he aprendido a confiar en las personas que saben más que yo. Me gusta el esfuerzo que exige, porque no he trabajado para aprobar un examen sino para conseguir una meta, haciendo aquello que me apasiona>>. Sueña con publicar su primera novela y está dispuesta a volcar en ella todo su esfuerzo. Y piensa que algún día se dedicará a la psicología y a la comunicación.

Leer a Carmen Almandoz:

Cinco minutos
Cuando aprieta el hambre
La primera noche

Hace años que María Gámez (colegio Ayalde, Vizcaya) compró “El Principito”, de Antoine de Saint-Exupéry. <<Como muchos dicen, es un libro para leer varias veces a lo largo de la vida, ya que en cada momento se interpreta de distinta manera. En mi caso, me ayuda a reflexionar sobre la amistad, el amor o los defectos del ser humano, más visibles desde los ojos de un niño>>. Aconseja la lectura de “Matar a un ruiseñor”, pues <<antes de empezar la carrera de Derecho me pareció apropiado leerlo, ya que el padre de la protagonista es abogado y el libro trata sobre los conflictos raciales, las apariencias y la familia, desde la voz de una niña>>. Con “La chica del tren” <<descubrí los thrillers, como los de la novelista Shari Lapeña. Me parece el género perfecto para aficionarse a leer>>. María opina que cuando leemos una novela, <<la profundidad con la que llegas a conocer a los protagonistas crea una complicidad que te hace sentir parte de la historia>>. 

<<Por más que me lo haya propuesto, no he conseguido leer todos los días>>, confiesa Gámez, que ha empezado la carrera universitaria de Derecho. <<Hay libros que me han mantenido noches en vela y otros, en cambio, he preferido leerlos con calma>>. Y dependiendo del título que sea, los compra en la librería de su barrio o por Amazon. <<Cuando se trata de thrillers, es mi padre quien me recomienda títulos. Cuando se trata de libros juveniles, sé a qué amigas pedir recomendaciones, ya que no comparto los mismos gustos con toda mi pandilla>>. 

María cree que <<hay cuentas muy interesantes en todas las redes sociales que no obtienen el reconocimiento que se merecen. Aconsejo no seguir tiktokers o instagramers de moda, y tratar de encontrar cuentas con contenido más original, que más allá de entretener, inspiran, como la que surgió a raíz de la pandemia del coronavirus: @covidartmuseum>>.

<<Continuamente se me ocurren nuevas ideas para escribir, ya sea por la noche en casa, en el autobús, andando por la calle… Cuando esto sucede abro la aplicación de notas del móvil y apunto la idea en pocas palabras. Así, cuando me siento frente al ordenador tengo muchas posibilidades anotadas. La mayoría no suele dar fruto, pero siempre encuentro alguna que merece la pena>>. Una vez acaba de redactar un texto, María suele olvidarse de él <<durante unos días, para después releerlo y decidir si hago algún cambio. Siempre hay algo que mejorar: es imposible elaborar un texto perfecto a la primera. Incluso tras ser publicado, encuentro cosas que se podría haber mejorado>>. 

<<Debemos imaginar la sociedad que queremos para, a continuación, tratar de mejorarla. La escritura nos da esa libertad creativa para plasmar y transmitir ideas. No olvidemos que los cambios sociales nacen de las ideas. Fue cuando una de mis profesoras me presentó Excelencia Literaria que me empecé a plantear si podría escribir correctamente. Durante los años en los que he participado ha habido momentos en los que creía que escribir no era lo mío, que debía centrarme en otras cosas, pero la motivación que he recibido me ha animado a seguir>>, concluye. <<Ahora sé que leer y escribir es mucho más que un hobby. La escritura puede estar al alcance de muchos, pero Excelencia Literaria es una oportunidad única>>.

Leer a María Gámez:

Animal civilizado
El rey que perdió a su reina
Un loco enamorado

Diana Latorre, del colegio Sierra Blanca (Málaga), no tiene un escritor favorito, <<pero me gustan mucho las novelas de Georgette Heyer, ya que los personajes que crea son absolutamente entrañables y las dinámicas entre ellos suelen ser muy divertidas. No me olvidaré de libros como “La indomable Sofía” o “El Dandi”. Nos enseñan aspectos sobre la Inglaterra victoriana y la etiqueta que se estilaba en aquella época >>. Pero a la hora de aconsejar alguna lectura, elige “El bestiario de Axlin”, de Laura Gallego, y “Blanca como la nieve y roja como la sangre”, de Alessandro D´Avenia, con el que Diana reflexionó a fondo sobre la vida, la muerte y la religión.

Diana dice que <<cuando veo adaptaciones al cine de un libro, los personajes son distintos a cómo me los imaginaba, lo que me resulta un poco desagradable porque en una novela puedes modelar la imagen de los protagonistas libremente; con un poco de imaginación puedes recrear escenas de acción muy emocionantes, paisajes hermosos, etc.>>. Diana Latorre, además de leer y escribir, dibuja y pinta. Suele comprar sus libros en ebook, al ser más baratos, aunque prefiere la lectura en papel. Y cree que las redes sociales deben servir <<para compartir nuestros talentos con personas afines a tus pasiones>>.

<<Las ideas suelen venirme en momentos de silencio y tranquilidad, es decir, a las dos de la mañana… Así que me levanto, las apunto en un papel, las intento desarrollar en mi mente y al día siguiente escribo lo que me dictan esos apuntes. Después dejo reposar mi escrito y vuelvo a él unas horas más tarde, para modificarlo y cambiar las cosas que no me gustan. Siempre repaso los textos porque soy impulsiva y tiendo a redactar sin pensar. Así que descanso y lo vuelvo a leer unas horas más tarde, cuando mis ideas se han asentado y soy capaz de corregirlo con objetividad>>.

Diana Latorre cree que en los relatos, novelas, artículos… se puede ayudar al lector a descubrir que el mundo no es tan pequeño ni cerrado como podemos creer. <<Gracias a mi colegio, Sierra Blanca, me apunté a Excelencia Literaria. Entendí que es necesario compartir aquellas historias que llevamos en nuestro interior. Excelencia Literaria me ha hecho mejorar mis textos y me ha enseñado a estructurar lo que escribo. Pero, sobretodo, me ha enseñado a aceptar las correcciones sin que me desmotiven. Ahora valoro más mis trabajos>>. Al pensar en el futuro, anuncia: <<Ojalá un día llegue a ser escritora o dibujante. O combinar estos dos oficios>>.

Leer a Diana Latorre:

El viaje
Manto de estrellas
Uno dos

Inmaculada es usuaria habitual de Instagram, donde considera que <<uno puede plasmar sus sueños>>. En este sentido, tiene previsto abrir un perfil en el que ir publicando sus textos. <<Para mí la escritura es una vía de escape>>, nos dice. <<Cuando no puedo más a causa del ritmo y la presión de la vida, las palabras brotan solas >>. Inmaculada asegura que repasa sus artículos muchas veces. Incluso llega a leérselos a sus amigos para que le digan cómo mejorarlos. Por otro lado, <<la Literatura puede ayudar a aquellas personas que no se sienten escuchadas, a aquellas que sienten que nadie las comprende; es una buena compañía para la gente que está sola>>. Su centro de estudios, Zalima (Córdoba), ha sido fundamental para el éxito que ha alcanzado en este concurso: <<Desde el primer momento María Luisa Aguirre, mi profesora me ha ido animando a mejorar y a seguir escribiendo>>. 

Excelencia Literaria <<me ha ayudado a valorar mi modo de pensar y expresar lo que llevo dentro. Desde pequeña buscaba el modo de reflejar mis sentimientos, y con este proyecto he comprendido que el método es la escritura>>, comenta. Sueña convertirse en cirujano, formar una familia y seguir ayudando a los demás. <<Estoy dispuesta a poner esfuerzo y dedicación para conseguirlo>>.

Acaba de comenzar la carrera de Medicina y es lectora fiel de Isidoro Falcones (“La catedral del mar”, “La mano de Fátima”), porque en sus novelas << habla de la superación personal mediante la lucha por vivir los ideales, y apuesta por la dignidad y libertad. También muestra la convivencia entre personas de distintas razas y religiones, lo que nos ayuda a pensar acerca de la tolerancia>>. Recomienda “Donde el corazón te lleve“, de Susanna Tamaro, pues a través de distintas anécdotas de la protagonista, el lector reflexiona acerca del destino, del amor verdadero, la muerte y la importancia de las decisiones personales>>. Sin embargo, no se decanta por un solo autor: <<¿Cómo elegir entre escritores de diferente temática o estilo narrativo? Siento que en cada novela se esconde un distinto escritor favorito>>.

Miriam, que ha estudiado en el colegio Senara, de Madrid, piensa que << sería un delito pensar que la lectura ha perdido valor, pues leer va a ser siempre un privilegio. Un buen libro, un revolucionario artículo, un relato, una frase y hasta una sola palabra, cambian el mundo. La lectura no debe entenderse como una imposición sino como un placer>>. Además, para Miriam Ramírez hay infinidad de lugares donde encontrar muy buenos libros, <<como las tiendas de compra y venta de libros de segunda mano. Son mi rincón favorito para encontrar y dejar buenos títulos>>. 

<<Normalmente escribo en ordenador, pues me permite editar cuantas veces quiero, el espacio es ilimitado y puedo guardar una copia de seguridad. Asimismo me gusta reservar un espacio en el teléfono que me permita guardar ideas, frases o palabras que me llegan de modo espontaneo, de improviso>>, dice. <<Realizo numerosas revisiones antes de enviar mis escritos; para cambiar el mundo hay que asegurarse de hacerlo bien>>. Miriam cree que la Literatura es un arma de reforma social: <<La escritura nos permite llegar a millones de personas con un solo click. Desde la Literatura podemos dar un giro completo a aquello que creamos que hace daño a las personas y, de este modo, convertirlo en algo bueno>>. 

Antes de que conociera Excelencia Literaria <<escribía solo para mí. Pensé que mis aportaciones nunca saldrían de mi cuarto, que ser leído era solo una ilusión. Pero el proyecto me ha dado una oportunidad para llegar a mis lectores>>. 

Leer a Miriam Ramírez: 

Alumna del colegio Entreolivos (Sevilla). “Patria”, de Fernando Aramburu, es una de las últimas novelas que ha leído. <<Pero a la hora de recomendar, me quedo con “El guardián entre el centeno”, de J. D. Saligner, un clásico que no puede faltar en la lectura de un adolescente. Y, por último, con “El Señor de los Anillos”, que entusiasmará a los aficionados a las trilogías fantásticas. El mundo que crea J. R. R. Tolkien y sus personajes te enamoran, y la novela me hizo reflexionar acerca de la fe>>. 

<<Al leer juegas: la historia está escrita por otro, pero eres tú quien decide cómo son los personajes, los escenarios… algo que no sucede en el cine, donde los espectadores vivimos experiencias muy parecidas>>. Respecto a la lectura, Mercedes sabe que es difícil dedicarle un tiempo diario, pero en su caso ha hecho costumbre leer antes de dormir. <<Mis padres son quienes me aconsejan que lea este o aquel libro. También mis amigos. Y sigo a un par de youtubers que hacen reseñas literarias>>. 

<<La Literatura es una forma de alzar la voz sin tener que gritar. Con las palabras se puede hacer una denuncia social; eso sí, intentando dar una solución al problema, con respeto e intentando entender lo que piensan los demás>>. Agradece al colegio Entreolivos que le abriera las puertas a Excelencia Literaria, que <<sin duda ha sido mi impulso para la escritura>>. Y manifiesta un sueño: <<vivir rodeada de las personas que me hacen mejor>>. 

En sus años de secundaria y bachillerato, en el colegio Munabe (Vizcaya), Manuel leyó “El Conde de Montecristo”, de Alejandro Dumas, <<que atrapa al lector desde el primer instante, gracias a su dinamismo y la calidad de escritura, que une varias historias paralelas>>. También disfrutó “Cobra”, de Frederick Forsyth, por su gran realismo, y “El retrato de Dorian Gray” de Oscar Wilde, <<que plantea el conflicto entre las apariencias y la verdad que, tantos años después, vemos cada día>>. Para Manuel, la lectura <<nos da criterio, cultura, apertura de mente… Nos hace crecer>>. Tras las agotadoras horas de estudio, <<utilizo la lectura como descanso>>. Su biblioteca familiar, por cierto, está bien nutrida. <<Los libros me los aconsejan personas de mi entorno, como mis hermanos mayores, mi padre, mis profesores y algún profesional al que haya tenido ocasión de escuchar>>.

Acerca de las redes sociales, Manuel Sureda lanza una pregunta: <<¿Será ejemplar para nuestros hijos que vean aquello que publicamos?>>. A la hora de escribir, se hace <<un pequeño esquema con las ideas principales que quiero transmitir y luego realizo un primer borrador que dejo reposar un par de días antes de revisarlo y hacer las correcciones convenientes. A continuación envío mi artículo a un par de personas con criterio literario, para que me den su opinión >>. 

<<Dentro de quince años me veo como un empresario, dirigiendo un gran proyecto de ingeniería en algún país en vías de desarrollo, feliz con una familia y escribiendo para algún periódico>>, sueña Manuel.

El sevillano Juan Pedro Gálvez, que finalizó sus estudios en el colegio Tabladilla (Sevilla), es lector de novelas de ciencia ficción, como La trilogía de “Nacidos de la Bruma”, de Brandon Sanderson. También tiene un hueco para “El Principito”, de Antoine de Saint-Exupéry, por su aparente simplicidad. <<Es una obra para leer y releer>>. Entre sus escritores favoritos, Isaac Asimov. 

<<Cada novela es una experiencia diferente para cada lector. Autor y lector van creando la trama conjuntamente. En cada libro dejo una pequeña parte de mí entre sus páginas, donde se queda hasta que vuelvo a abrirlo>>. Juan Pedro lee mientras espera al autobús, en el metro, entre clase y clase, antes de dormir <<y hasta andando por la calle (igual que la gente que va concentrada en la pantalla del móvil). Siempre hay tiempo para leer si de verdad quieres tenerlo>>, concluye. <<La biblioteca de mi barrio es uno de los mejores sitios para encontrar libros. Además, gracias a internet consigo libros difíciles de encontrar en papel. Mi biblioteca personal es pequeña: solo tiene los libros que más me han gustado>>. <<La lectura me ha dado tres cosas que considero fundamentales: inspiración, imaginación y motivación. Muchas novelas sacan lo mejor de mí, y es ahí donde radica el poder de la Literatura>>. Por eso le da tristeza que muchos chicos como él no lean. <<Los padres y, en menor medida, los profesores son clave para despertar la sed por la lectura>>.

<<He activado el “control parental” en mi móvil, para restringirme el tiempo que dedico a las redes sociales. Son útiles y positivas, hasta que se hacen adictivas>>. Y dice acerca de su método de escritura, <<no lo tengo, a pesar de ser una persona cuadriculada. Eso sí, escribo un rato todos los días>>.